lunes, 28 de julio de 2014

BARK (LORRIE MOORE)



“Bye! Thank you for sharing my birthday with me!” Ira called out. Where affection fell on its ass, politeness could step up. But then there was the heat and sorrow again just filling his face.”
“Debarking”,
Lorrie Moore


Están hartos de oírme decir que desconfío de símiles y tropos, porque, utilizados en exceso, conducen a una prosa demasiado consciente de sí misma y por aquí, ya lo saben, apreciamos, sobre todo, la economía y sencillez, aun aparente, de un Salinger, un Vonnegut, un Roth o una Mary McCarthy. Hace ya tiempo, sin embargo, que señalo a Lorrie Moore como a una de mis prosistas preferidas alegando en su favor la brillantez de sus metáforas, osadas e imaginativas, sí, pero que se leen con absoluta naturalidad.
Es cierto que Bark no es la muestra más sobresaliente del genio de Moore pero igualmente hay en ella destellos brillantes no solo en lo que se refiere a los tropos sino también, y sobre todo, en sus diálogos. No en vano “Debarking” y “Foes”, acerca de una pareja sin esperanza y una discusión política de lo más acerada respectivamente, son, en opinión de quien les habla, los mejores relatos de esta colección. Nada parece impostado, todo encaja y los personajes son, en consecuencia, más reales y humanos.
¿Andan a la caza y captura de Literatura con mayúscula? Lorrie Moore no necesita peripecias ambiciosas ni epatantes epifanías. Toma una situación banal y cotidiana cualquiera y la vuelve extraordinaria a base de pequeños detalles concretos y dos armas fundamentales que todo escritor debería emplear: precisión y concreción.
Lean, lean. 


2 comentarios:

Jen dijo...

Jo, una de mis clientas favoritas, que además es autora local, me dijo que era una auténtica fan de Lorrie Moore, y me recomendó Birds of America.

¡Lo tengo que pillar ya! Y aumentar esa exteeeensa pila de lecturas pendientes que no se va a acabar nunca :)

CEci dijo...

Lorrie Moore es una de las más grandes prosistas de hoy. Se suelen destacar sus relatos pero a mí me encantó su novela "Al pie de la escalera".

Que las lecturas pendientes no se acaben nunca, Jen. Eso sí, pidamos que no crezcan exponencialmente.

Gracias por el comentario. ¡Un saludo!