“Las pequeñas cosas, como usar correctamente el lenguaje, son lo que hace funcionar al mundo. Funcionar correctamente, quiero decir. Si no hacemos caso de esas pequeñas cosas, el caos se impondrá. Esa clase de errores son pequeñas grietas en la presa y usted cree que no importan, pero se acumulan, sus errores y los de todos los demás, y entonces sí que importan.”Algún día este dolor te será útilPeter Cameron
No por casualidad se
cierra esta edición de Algún día este
dolor te será útil de Peter Cameron (Libros del Asteroide) con una cita de
Salinger, pues su protagonista, James Sveck, es heredero directo del bueno de
Holden Cauldfield. Sensible hasta decir basta, más papista que el Papa,
solitario e inadaptado, James Sveck se mueve por el Nueva York estival tratando
de evitar la senda más transitada y vulgar, la Universidad. Si Holden se
rebelaba contra la falta de autenticidad del mundo circundante, James, un punto
elitista, choca contra la vulgaridad y zafiedad de sus congéneres pero sufre,
sobre todo, por el enorme desajuste existente entre el pensamiento y su
formulación. Y si tal es la brecha existente entre la idea y las palabras, ¿por
qué molestarse en hablar? Wittgenstein dixit.
De modo que se resiste a abrirse a sus divorciados y disfuncionales padres, a
su diletante hermana y a su exasperante psiquiatra y, como todos los
introvertidos que en el mundo son, guarda sus angustias y temores para sí y,
por suerte, también para nosotros. Por suerte, digo bien, pues como narrador
James es inteligente, lúcido, brillante y, curiosamente, muy muy divertido.
Algún día este dolor te será útil es una pieza brillante en su
forma y conmovedora en su fondo, si es que tal distinción –la de fondo y forma,
digo- existe. Al fin y al cabo, el bueno de James tiene más razón que un santo
en lo que se refiere a las palabras que presiden esta entrada: el uso correcto
del lenguaje hace funcionar al mundo. Y novelas como esta hacen que la vida
valga mucho más la pena. Así que, ya saben, lean lean.
3 comentarios:
Muy buena pinta, sobre todo pq toca más de uno de mis puntos flacos respecto al lenguaje... aunque el título es de los de pararse un momento a pensar XP (ala, lo añadimos a la enorme lista de la compra!)
Lo disfrutarás, Nit. El título es irónico. Hace referencia al nombre de un campamento de vela en el que el narrador sufrió lo indecible de crío. Y, a tenor de lo visto, no. El dolor de entonces fue completamente inútil. Como acostumbra a ser el dolor, claro. ¡Saludos!
Como curiosidad: me he estado mirando la edición en inglés y el diseño roza los libros de autoayuda ¿conscientes de la ironía que mencionas? yo voto que no y solo por eso estoy por comprármelo (y perdón por todo este rollo!)
Saludos!
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